Durante 2 sesiones compartí con la artista plástica Beatriz Pineda. Por una parte Beatriz me aproximó a la pintura con cochinilla y su versatilidad cromática gracias a la incorporación de distintos mordientes y modificadores de color.
Es fundamental la grana cochinilla en la obra de Beatriz. Conoció éste milenario tinte en Oaxaca y ha desarrollado sus propios modos de trabajar con ella.
Por otra parte compartí con Beatriz las reservas con cera propias del batik y luego pintamos las telas reservadas con cochinilla.
P.D. Conozco la cochinilla, puesto que es un tinte natural muy importante gracias a la gama de colores poco habituales que entrega, pero en mis trabajos prefiero los tintes de origen vegetal.